Paradoja del bien y el mal

Estamos muy acostumbrados a pensar que el bien viene de Dios y el mal del demonio, como si fueran dos entidades totalmente separadas en visión, espacio, tiempo, circunstancias y características. ¿Pero porque debemos separar estos dos términos si salieron de la misma mente creadora?

En muchas ocasiones me han preguntado en que creemos los Unitarios Universalistas y generalmente inicio diciendo que el Unitario Universalismo es una religión sin dogmas y trato de explicar, no literalmente nuestros siete principios, ya que no me los sé de memoria, pero los explico desde el punto de vista de la vida real, como yo los vivo. También me han preguntado si el ser parte de los Unitarios Universalistas me ha hecho ser una buena persona y la contestación invariablemente es no. Y mucha gente me replica que en cambio sus religión les enseña a ser les enseña a ser buenas personas.

¿Que entendemos por el bien y que entendemos por el mal?, ¿Quien personifica al bien y quien al mal?, ¿quién creo el bien y quien el mal y que función tienen en el desarrollo de la humanidad?, en otras palabras, para que fue hecho el bien y el mal.

El Génesis nos dice que Dios creo a Adán y a Eva, los puso en el jardín del Edén y les dijo, yo les entrego para que ustedes se alimenten, toda clase de hierbas, de semillas y toda clase de árboles frutales. También les dijo: Ustedes pueden comer de cualquier árbol que haya en el jardín, menos del árbol de la conocimiento, del bien y del mal.

Algunos teólogos dicen que el árbol que cita la Biblia era del conocimiento, del bien y del mal, ya que una vez que Adán y Eva comieron del fruto de dicho árbol ambos se dieron cuenta de que estaban desnudos, adquirieron en ese instante el conocimiento de la vergüenza y el pudor.

El cristianismo a ese hecho le nombro el pecado original y algunos teólogos nos dicen que el pecado fue la desobediencia y otros nos dicen que fue un pecado doble, ya que aparte del pecado de la desobediencia, está el pecado de la soberbia que es el tratar de adquirir los conocimientos de la vida para parecerse a Dios.

Yo me puse a pensar; si Dios creó todo le existente, lo visible y lo invisible, si dios creó a Adán y a Eva, al igual que a la serpiente, asumo que Dios creo también el bien y al mal por igual. ¿Pero para que los creó?

Estamos muy acostumbrados a pensar que el bien viene de Dios y el mal del demonio, como si fueran dos entidades totalmente separadas en visión, espacio, tiempo, circunstancias y características. ¿Pero porque debemos separar estos dos términos si salieron de la misma mente creadora?

Esta dualidad no solamente la podemos encontrar en la tradición Judeo-cristiana, también la encontramos en muchas otras filosofías y religiones. Por ejemplo, La dualidad Yin y Yang.

Este símbolo del ying y el yang es quizá el tema de la filosofía china más difundido en occidente. Por ser patrimonio común a distintas escuelas de pensamiento, este concepto adquiere diferentes matices interpretativos, según se lo considere en el marco doctrinal del taoísmo.

El Yin denota profundidad, tranquilidad, oscuridad relacionándose con la luna, la noche, el agua, el lado femenino, el color negro o azul, la voz suave, los movimientos tranquilos, la tierra, el sueño, la muerte, el otoño, etc. y El yang denota actividad, movimiento, luz, y por tanto se relaciona con todo lo que sugiere estos aspectos como puede ser el Sol, el día, el color rojo, la voz fuerte, el estrés, la vigilia, la vida, el fuego, el ruido, el verano, lo masculino, y así sucesivamente..

Unos de los símbolos que mejor describen la dualidad y movimiento de la energía Yin y Yang es el conocido símbolo del Tai Chi. Este símbolo aparece divido en dos partes, una de color blanco o claro (la energía Yang) y otra de color oscuro o negro (la energía Yin), una línea ondulante divide las dos secciones de forma que al crecer la parte Yang decrece la parte Yin, y viceversa al decrecer el Yin aumenta el Yang. El la parte Yin aparece un pequeño circulo de color claro que indica que en las profundidades del la energía Yin se haya energía Yang, de igual forma en la parte Yang aparece un pequeño circulo que contiene energía Yin.

Tanto la energía yang como la energía yin o el bien y el mal en nuestra cultura, son necesarias y de ellas encontramos infinitos contrastes y grados. Si todo fuera totalmente yang o yin, bien y mal, blanco y negro, no habría color en el mundo, no existiría el cambio y la ausencia de diferencias limitaría la creatividad del universo.

¿Pero en realidad para que nos sirve tener esta dualidad bien y mal?, Yo creo que nos sirve para crecer, nos hace aprender, y como resultado nos hace ser mejores seres humanos.

Yo no creo que Dios se haya equivocado cuando plantó el árbol del conocimiento, del bien y del mal en el jardín del Edén. En lo personal, creo que fue con el propósito de que esos primeros seres humanos, lo tomaran y crecieran, adquirieran conocimientos y se desarrollaran, porque si no fue así, entonces, ¿para que Dios puso un árbol de tales características y luego decirles que no lo tocaran? Yo creo que si Dios no hubiera realmente querido que la humanidad adquiriera ningún conocimiento, no hubiera plantado ese árbol y tal vez él se hubiera ahorrado algunos dolores de cabeza.

Dios es bondad y sabiduría infinita y no creo que las cosas las haya hecho al azar, creo que dios sabía perfectamente que tanto Adán como Eva iban a tomar del fruto de ese árbol., si no, no tendría razón nuestra existencia en esta vida

En la vida diaria, aflora en nosotrxs nuestra feminidad y masculinidad, nuestra debilidad y fortaleza, nuestra tristeza y alegría, nuestra maldad y bondad.

Esto hizo que recordara un cuento-no recuerdo ni el nombre ni el autor-que dice:

Un joven acude con un maestro para solicitar un consejo acerca de un sueño que tiene.

Maestro, cada noche sueño con dos lobos, uno negro otro blanco que pelean entre sí, pero antes de que termine la pelea, yo despierto. ¿Maestro cuál de los dos es el ganador?

El maestro medita un rato y le responde: Va a ganar a aquel que tú alimentes.

Jesús dijo, la verdad os hará libres, entonces vayamos a buscar la verdad, busquémosla mas allá de estas paredes virtuales, no nos quedemos esclavizados con todas las medias verdades que sabemos, busquemos la verdad más allá de las estrellas, como dice uno de nuestros siete principios, “buscar la verdad con libertad, pero con responsabilidad”, hagamos uso de los dones que la Naturaleza, Dios, el Universo o como queramos nombrar,   nos doto; el don del razonamiento, del aprendizaje, de la honestidad y del amor. Transformemos lo que creamos malo en nosotros mismos en algo bueno, a través del conocimiento de nosotros mismos.

Esto es lo que hacen en mí los siete principios Unitarios Universalistas, me desafían a ser una mejor persona cada día.