Celebrando

“Nos revelamos a nosotros mismos y a los demás lo que es importante para nosotros por la manera en la que celebramos.~ Noël Piper

¿Que celebras en estas fechas?

Noviembre, o el 31 de octubre para algunos, marca el inicio de la temporada de fiestas; temporada en la que parece que todos tenemos muchas oportunidades de celebrar. Pero las celebraciones no se limitan a una temporada específica nada más. Me gustaría sugerir una clasificación de las celebraciones en tres tipos: personales, interpersonales, y comunitarias.

Las celebraciones personales nos permiten celebrar quienes somos: nuestros cumpleaños, logros, parteaguas, etcétera. Muchas de las celebraciones ocurren en la privacidad de nuestros hogares, publicándolo en redes sociales o al compartirlas y celebrarlas con nuestros amigos cercanos y seres queridos.

Las celebraciones interpersonales son aquellas en las que somos invitados a celebrar los logros, parteaguas o fechas importantes de nuestros seres queridos y amigos. Nos regocijamos en su felicidad.

Las celebraciones comunitarias se refieren a las cosas que celebramos con la comunidad mayor: la victoria de nuestro equipo favorito, la aprobación de una ley específica, días festivos, conciertos que validan nuestra identidad o que simplemente nos dan placer.

Las celebraciones son hitos, momentos destacados en la historia de nuestras vidas. Interrumpen el fluir ordinario de nuestras vidas: están diseñadas para eso. En su definición original, una celebración es una reunión en un espacio donde podemos compartir el resultado positivo de un evento o para honrar algo o a alguien.

Además, ya que muchas de nuestras celebraciones están determinadas por nuestro contexto cultural, me pregunto si es que hay celebraciones que no son fomentadas por nuestras sociedades o círculos sociales pero que nos beneficiaríamos mucho si las reconociéramos como tales.

Por ejemplo, por años batallé con la traducción de la palabra “worship” al español. Las palabras más cercanas que pude encontrar eran culto y adoración. En mi experiencia, muchos grupos evangélicos usan ambas palabras ampliamente y sin dudar. Pero como unitaria universalista, me costaba trabajo el no pensar en “cultos” cuando escuchaba la palabra culto y el no pensar en las concepciones tradicionales de Dios cuando usaba la palabra adoración. Pero fue apenas hace unas semanas, que en un servicio dominical, encontré la palabra correcta para “worship”: celebración. Y ¿qué no son nuestros servicios dominicales una celebración? En el sentido literal de la palabra, si es que entendemos “celebración” en su significado más básico de “asistencia numerosa”, pero ¿son, o pueden ser, nuestros servicios dominicales más que solo una reunión de personas?

De vuelta a los tres tipos de celebración, creo que muchos de nosotros tendemos a tener mayor éxito con algunos tipos de celebraciones que con otras, pero todas son importantes. Por ejemplo, el celebrar nuestros éxitos y logros personales nos permite reconocer nuestro propio valor, nos motiva y eleva nuestra autoestima. El celebrar a otros puede fortalecer nuestras relaciones y lazos con aquellos cercanos a nosotros; estas celebraciones pueden ayudarnos a entender muchas de nuestras experiencias como experiencias compartidas y pueden promover la empatía. Mientras que el celebrar con la comunidad y con el mundo, con extraños y con aquellos que son distintos a nosotros, puede ayudarnos a ahondar nuestro sentido de interconexión real, puede ampliar nuestra percepción y entendimiento del mundo y puede ayudarnos a ver realmente nuestra humanidad compartida. Estas celebraciones nos hacen parte de algo mayor a nosotros y nuestros círculos sociales.

No creo que un tipo de celebración será superior a las demás, pero sí creo que cada una nos puede proveer con diferentes dones que valen la pena cultivar.

Ejercicio Espiritual –

Basándose en los tres tipos de celebración explicados (personales, interpersonales y comunitarias), los invito a pensar sobre cuál de estas está más presente en su vida y si es que alguna hace falta. A medida que reflexionen sobre sus propias experiencias, respondan a las siguientes preguntas.

• ¿Hay algún tipo de celebración que haga falta en tu vida? ¿Por qué?
• ¿Qué pasaría si trataras de incorporarlas todas de manera intencional en tu vida?
• ¿Qué evita que te involucres en algunas celebraciones?
• ¿Qué necesitas celebrar más?

Preguntas de discusión

• ¿Cuál es la mayor celebración que tienes durante el año?
• ¿Qué te cuesta celebrar?
• ¿Hay algo que pueda ocasionar que una celebración pierda su sentido de reverencia o significado?
• Si nuestros servicios dominicales son un tipo de celebración, ¿Qué celebramos?

Palabras de sabiduría

“Lo que la vida espera de nosotros es que celebremos.”

~ José Eduardo Agualusa
“Cuando se llegue mi hora, me gustaría que ese día fuera una celebración de vida, no una mórbida procesión de gente en duelo.”

~ Joseph Rain
“El alma acepta el misterio dentro y alrededor, sumergiéndose en él, celebrándolo.”

~ Jay Woodman
“Olvidé lo que celebrábamos porque siempre estábamos celebrando algo: un nuevo empleo, un nuevo poema, un nuevo amor, un nuevo sueño.”

~ Audre Lorde

“¿Tú quedándote solo en casa la noche de año nuevo? Toma mi consejo, el conteo final debe ser compartido con alguien o se convierte en otro conjunto de números pasándote de largo.”

~ E.A. Bucchianeri
“El documentar los pequeños detalles de tu vida diaria se convierte en una celebración de quien eres.”

~ Carolyn V. Hamilton

“Nos revelamos a nosotros mismos y a los demás lo que es importante para nosotros por la manera en la que celebramos.”

~ Noël Piper